Aunque no es especialmente llamativa en cuanto a su aspecto, sí resulta realmente curiosa la leyenda que hay en torno a esta "Piedra del Milagro", situada frente a la que fuera la casa de Pedro Fernández de Teresa, a unos pasos de la Plaza de San Martín.
Según cuenta la leyenda, Pedro Fdez, en el año 1.453 pidió dinero prestado a un judío de la villa, pero no se lo devolvió. Éste lo denunció ante la autoridad eclesiástica y fue excomulgado por ello. Al cabo de unos años Pedro acabó devolviendo el préstamo, pero olvidó comunicarlo al clero para que le levantaran la excomunión.
Pasó el tiempo y cuando Pedro estaba en su lecho de muerte, pidió la confesión y la comunión, pero misteriosamente, el sacerdote fue incapaz de darle la Sagrada Forma, ya que ésta quedó pegada a la patena sin que pudiera ser despegada de ninguna de las maneras. Acabaron por darse cuenta del motivo, le levantaron la excomunión y pudo comulgar, aunque con otra Forma, pues la anterior siguió sin poder ser despegada de la patena.
Esto fue denominado como "milagro" y suscitó una gran devoción popular en toda la comarca. Hoy en día, dicha patena se exhibe en el Museo Parroquial de la Iglesia de San Pedro.
Minube, Colaboradora: Lala