Realizar el Camino de Santiago a caballo es una opción que ha ido ganando cada vez más adeptos en los últimos años.
Esta tradición se mantiene desde la Edad Media, donde algunos peregrinos ya comenzaban a realizar el trayecto hasta Santiago de esta peculiar forma.
A diferencia del resto de formas de hacer el Camino, esta requiere una planificación previa mucho más meticulosa.
Antes de nada es necesario comprender que se necesita una extensa preparación previa, siendo imprescindible contar con experiencia cabalgando, de lo contrario es muy fácil lesionarse y sufrir rozaduras.