El descubrimiento del Disco de Phaistos, en 1908 en las ruinas del Palacio de Creta (Grecia), abrió una nueva línea de investigación sobre los orígenes del juego de la oca. El disco de Phaistos, pertenece al periodo Minoico Medio III y por ello su antigüedad debe estar comprendida el intervalo de 1580 a 1700 a. C.
Consiste en un disco de arcilla, de forma circular y aproximadamente 16 cm. de diámetro y 2,1 cm. de espesor. Ambas caras del disco contienen sendas espirales, que están divididas en 30 y 31 casillas, en las cuales aparecen diversos dibujos, entre los que podemos apreciar la figura de 8 pájaros, que bien podían ser Ocas.
Consiste en un disco de arcilla, de forma circular y aproximadamente 16 cm. de diámetro y 2,1 cm. de espesor. Ambas caras del disco contienen sendas espirales, que están divididas en 30 y 31 casillas, en las cuales aparecen diversos dibujos, entre los que podemos apreciar la figura de 8 pájaros, que bien podían ser Ocas.
Los jeroglíficos representan:
Personajes: hombres, mujeres y niños con cuerpo y cabeza desnudos y con cascos.
Animales: peces, aves.
Plantas: flores, espigas
Objetos diversos: recipientes, armas, barcos...
Origen Templario
Otra corriente de investigación atribuye su origen a los templarios, los cuales usaban en sus ratos de ocio en Jerusalén las conchas del "Nautilus", al cual le asignaran, además del componente lúdico, un mensaje criptográfico, que sólo determinados miembros de la Orden, eran capaces de descifrar. La concha del "Nautilus" tiene 63 espacios que quizás sean el origen de las 63 casillas del juego de la oca.
Los Templarios eran los guardianes de los Lugares Santos de Jerusalén así como de los caminos que conducían a los mismos.
Esta labor de custodia se extendió al Camino de Santiago, por entonces aún en manos de los musulmanes, en muchos de sus tramos por la Península Ibérica.
El Juego de la Oca es un mapa simbólico cifrado del Camino de Santiago donde los Templarios y Compañeros Constructores marcaban los lugares que tenían una determinada significación. Es un jeroglífico donde los símbolos eran conocidos por los iniciados de la Orden y que permitía un entendimiento a todos los caballeros de la Orden independientemente del idioma de cada uno.
En otras palabras, el Juego de la Oca era la Guía del Camino. Pero ¿cómo reconocer los lugares indicados en la Guía?
Los Templarios eran monjes y soldados y compartían los Mensajes Ocultos con el gremio de Compañeros Constructores que realizaban las catedrales y monumentos dejando los símbolos que reconocían los Templarios y marcaban las ubicaciones que figuraban en el Juego de la Oca.
Tenemos resuelto los problemas de: Idioma, Guía y Carteles anunciadores de las ubicaciones. Pero se estará preguntando si cada iniciado templario se desplazaba con un Tablero de Juego de la Oca debajo del brazo. Nada de eso. Cada época tiene sus soluciones y son tan fáciles que a veces nos resultan inimaginables.
Origen Probable
Lo mas probable, es que el Disco de Phaistos no se corresponda ni sea el origen del Juego de la Oca pero quizás otros discos o juegos conocidos por los Templarios en Tierra Santa, fuesen el embrión sobre el que los Templarios desarrollaron un Juego y una Guía Jeroglífica.
Era importante que fuera un juego, porque ello permita refrescar continuamente la memoria de los iniciados sin peligro de olvido. Pensemos en el problema que tenemos hoy con recordar nuestras propias claves de los programas, bancos....
Los símbolos eran vulgares y ello permita un rápido conocimiento entre la población que no necesitaba conocer el significado oculto.
El Tablero era de fácil representación, fácil geometría, fácil de ubicar, orientado, direccionable, ordenado y métrico.
Habida cuenta que era un juego, no es de extrañar que otras ordenes religioso-militares, como los Hospitalarios o Caballeros Teutones, contribuyesen a la difusión del juego en el área geográfica de influencia pero sin el el componente criptográfico-esotérico.
Origen de la expansión lúdica
La invención del juego de la Oca es anterior al siglo XI pero cuando alcanzó una verdadera eclosión como juego fue durante el reinado de emperador español Felipe II.
El mecenas italiano Francisco de Médicis regaló a Felipe II un Tablero y dados del juego; los ociosos cortesanos y cortesanas, pronto empezaron a matar el aburrimiento con tan divertido juego.
En ese momento, Madrid, era la capital del Imperio donde "no se ponía el Sol" y todos los gobernantes mundiales estaban mediatizados por las decisiones que se tomaban en Madrid que influían en una rápida aceptación y difusión de nuestros gustos y modas.
El Juego de la Oca sustituyo prácticamente al Ajedrez en las Cortes europeas siendo un preciado regalo intercambiado entre los nobles.
Personajes: hombres, mujeres y niños con cuerpo y cabeza desnudos y con cascos.
Animales: peces, aves.
Plantas: flores, espigas
Objetos diversos: recipientes, armas, barcos...
Origen Templario
Otra corriente de investigación atribuye su origen a los templarios, los cuales usaban en sus ratos de ocio en Jerusalén las conchas del "Nautilus", al cual le asignaran, además del componente lúdico, un mensaje criptográfico, que sólo determinados miembros de la Orden, eran capaces de descifrar. La concha del "Nautilus" tiene 63 espacios que quizás sean el origen de las 63 casillas del juego de la oca.
Los Templarios eran los guardianes de los Lugares Santos de Jerusalén así como de los caminos que conducían a los mismos.
Esta labor de custodia se extendió al Camino de Santiago, por entonces aún en manos de los musulmanes, en muchos de sus tramos por la Península Ibérica.
El Juego de la Oca es un mapa simbólico cifrado del Camino de Santiago donde los Templarios y Compañeros Constructores marcaban los lugares que tenían una determinada significación. Es un jeroglífico donde los símbolos eran conocidos por los iniciados de la Orden y que permitía un entendimiento a todos los caballeros de la Orden independientemente del idioma de cada uno.
En otras palabras, el Juego de la Oca era la Guía del Camino. Pero ¿cómo reconocer los lugares indicados en la Guía?
Los Templarios eran monjes y soldados y compartían los Mensajes Ocultos con el gremio de Compañeros Constructores que realizaban las catedrales y monumentos dejando los símbolos que reconocían los Templarios y marcaban las ubicaciones que figuraban en el Juego de la Oca.
Tenemos resuelto los problemas de: Idioma, Guía y Carteles anunciadores de las ubicaciones. Pero se estará preguntando si cada iniciado templario se desplazaba con un Tablero de Juego de la Oca debajo del brazo. Nada de eso. Cada época tiene sus soluciones y son tan fáciles que a veces nos resultan inimaginables.
Origen Probable
Lo mas probable, es que el Disco de Phaistos no se corresponda ni sea el origen del Juego de la Oca pero quizás otros discos o juegos conocidos por los Templarios en Tierra Santa, fuesen el embrión sobre el que los Templarios desarrollaron un Juego y una Guía Jeroglífica.
Era importante que fuera un juego, porque ello permita refrescar continuamente la memoria de los iniciados sin peligro de olvido. Pensemos en el problema que tenemos hoy con recordar nuestras propias claves de los programas, bancos....
Los símbolos eran vulgares y ello permita un rápido conocimiento entre la población que no necesitaba conocer el significado oculto.
El Tablero era de fácil representación, fácil geometría, fácil de ubicar, orientado, direccionable, ordenado y métrico.
Habida cuenta que era un juego, no es de extrañar que otras ordenes religioso-militares, como los Hospitalarios o Caballeros Teutones, contribuyesen a la difusión del juego en el área geográfica de influencia pero sin el el componente criptográfico-esotérico.
Origen de la expansión lúdica
La invención del juego de la Oca es anterior al siglo XI pero cuando alcanzó una verdadera eclosión como juego fue durante el reinado de emperador español Felipe II.
El mecenas italiano Francisco de Médicis regaló a Felipe II un Tablero y dados del juego; los ociosos cortesanos y cortesanas, pronto empezaron a matar el aburrimiento con tan divertido juego.
En ese momento, Madrid, era la capital del Imperio donde "no se ponía el Sol" y todos los gobernantes mundiales estaban mediatizados por las decisiones que se tomaban en Madrid que influían en una rápida aceptación y difusión de nuestros gustos y modas.
El Juego de la Oca sustituyo prácticamente al Ajedrez en las Cortes europeas siendo un preciado regalo intercambiado entre los nobles.