De Jaca a Arrés: Qué ver, qué hacer

•Santa Cilia de Jaca:


Oficialmente, primera y única localidad de paso intermedia de la segunda jornada del Camino Aragonés. A 650 metros de altitud, el casco urbano de Santa Cilia se asienta en la Canal de Berdún, junto a la vega del río Aragón. La distribución del poblado se planificó a finales del siglo XII o en el siglo XIV, dando lugar a las calles rectilíneas y perpendiculares que podemos observar hoy. La construcción de segundas residencias, las más próximas a la N-240, van expandiendo los límites de este pueblo histórico del Camino de Santiago. Merece la pena entrar en alguna panadería de Santa Cilia, hacen pan de hogaza compacto que apenas desprende miga al cortarlo.

•Iglesia del Salvador:


De nave única. Tomó el relevo de una antigua iglesia medieval y se levantó en el siglo XVIII, manteniendo algunos elementos de épocas anteriores como la torre campanario y la portada gótica.

•Arrés:

Sobre un cerro y a 700 metros de altitud, Arrés es un incomparable mirador de la Canal de Berdún. Desde su privilegiada posición se pueden ver, en estratos definidos, los campos de cereal, el bosque de ribera del río Aragón, el monte bajo y al fondo la barrera pirenaica.

•Iglesia de Santa Águeda:


Del siglo XVI, presenta una sola nave, un atrio porticado y ábside poligonal. En Arrés también hay una torre fortificada del siglo XV. A desmano del itinerario oficial se encuentran Santa Cruz de la Serós y el monasterio de San Juan de la Peña, que dada su importancia cabe reseñar.

•Santa Cruz de la Serós: (Consultar entrada propia: Aragonés Secundario 01 San Juan de la Peña y Santa Cruz de la Serós)


En la N-240, a la altura del hotel Aragón, hay un cruce a mano izquierda que sube por la carretera A-1603 hasta Santa Cruz de la Serós. Son cuatro kilómetros.

•Arquitectura tradicional:


Arquitectura popular construida por el pueblo para el pueblo. Las viviendas, levantadas en piedra labrada, se caracterizan por tejados en V cubiertos de lajas superpuestas y dotados de chimeneas troncocónicas, que son rematadas por rudas figuras conocidas como 'espantabrujas'.

•Iglesia de Santa María:


Románica, de los siglos XI o XII, formó parte de un conjunto monástico habitado hasta 1555 por religiosas benedictinas. Presenta una sola nave dividida en tres tramos, dos portadas, tres ábsides - dos de ellos rectangulares - y una formidable torre con ventanas geminadas.

•Ermita de San Caprasio:



Pequeña construcción fechada en la primera mitad del siglo XI y que responde al esquema constructivo del románico lombardo, estilo procedente del norte de Italia y que también se encuentra representado en las famosas iglesias del Vall de Boí catalán. Fue restaurada a mediados del siglo XX bajo la dirección del arquitecto Chueca Goitia con el fin de suprimir añadidos posteriores al original.


•San Juan de la Peña: (Consultar entrada propia: Aragonés Secundario 01 San Juan de la Peña y Santa Cruz de la Serós)


Real Monasterio: Enclavado en la misma Sierra de la Peña, bajo una roca gigantesca del monte Pano, tiene su origen en un centro monástico del siglo X que fue refundado por el rey Sancho Garcés III, apodado el Mayor, en el siglo XI. El rito romano se introdujo en San Juan de la Peña en el año 1071. Tras el grave incendio del año 1675 se decidió construir un nuevo monasterio en una pradera conocida como Llano de San Indalecio, situada algo más arriba. En el monasterio viejo se puede ver la sala de los Concilios, la iglesia mozárabe, la románica - consagrada en 1094 -, la capilla de San Victorián del gótico florido, y el claustro, único por su ubicación y los expresivos capiteles de la arquería tallados por el maestro de San Juan de la Peña, que narran el Génesis y la vida de Jesús.