Finaliza el Año Jubilar con el cierre de la Puerta Santa, 31 de Diciembre de 2010

La Puerta Santa, clausurada hoy FOTO: RAMÓN ESCUREDO

El cierre de la Puerta Santa en la Catedral de Santiago de Compostela ha supuesto este viernes el final del Año Jubilar 2010, una apertura que no volverá a repetirse hasta 2021, cuando se celebrará un nuevo Año Santo.

El arzobispo de Santiago, Julián Barrio Barrio, que ha presidido el acto, ha procedido a cerrar la Puerta Santa con llave pasadas las 16.45 horas tras orar, de rodillas primero, y de pie, después, ante ella. Con esto, monseñor Barrio ha puesto el punto y final al Año Santo 2010, que ha traído a Galicia unos nueve millones de visitantes y durante el que Santiago ha recibido unos 270.000 peregrinos.

En el acto, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha actuado como delegado regio, como ya hiciera este jueves en la Ceremonia de Traslación. Además, han asistido, entre otras autoridades, el ministro de Fomento, José Blanco; la jefa del Legislativo gallego, Pilar Rojo; el delegado del Gobierno en Galicia, Antón Louro; el líder del PP, Mariano Rajoy; el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo; y los conselleiros de la Xunta, entre otras autoridades.

Sin embargo, el gran ausente de esta celebración ha sido el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que se ha convertido en el primer presidente de la historia de la democracia que no visita Galicia durante un Año Santo.

CEREMONIA

La ceremonia ha comenzado a las 16.00 horas de este viernes con un acto civil en la Praza do Obradoiro, donde el delegado regio, Alberto Núñez Feijóo, ha pasado revista a las tropas y ha saludado posteriormente a las autoridades presentes. A continuación, la comitiva ha entrado por el Pórtico de la Gloria y se ha reunido con la comitiva eclesiástica --encabezada por el arzobispo de Santiago y el cabildo de la Catedral--.

La procesión, que iba precedida por la Cruz de los Jóvenes en preludio de la Jornada Mundial de la Juventud que acogerá Madrid en 2011, ha salido después por la Puerta Santa hacia la Praza da Quintana, donde decenas de personas esperaban para ver el momento. Monseñor Julián Barrio ha sido el último en cruzar el vano.

Tras un breve acto litúrgico, el arzobispo se ha dirigido de nuevo al recinto de la Puerta Santa, donde se ha arrodillado y ha orado antes de proceder a cerrar el vano de bronce que ha tapiado la Puerta Santa y ha puesto punto y final al Año Santo 2010.

Para concluir, se ha dado lectura ante los presentes un mensaje enviado por el Papa Benedicto XVI al arzobispo de Santiago con motivo del cierre de la Puerta Santa, en el que el Sumo Pontífice ha confiado en que este Año Santo sirva para "hacer más presente en todos los pueblos de España" la luz del Evangelio.

A pesar de que el tiempo ha acompañado y el sol ha lucido durante la tarde, la afluencia de personas ha sido menor que la registrada a la apertura de la Puerta Santa, el 31 de diciembre de 2009. Sin embargo, han sido muchas las personas que, desde Galicia, España y el extranjero, se han acercado a Compostela para presenciar un evento que no se repetirá en 11 años.

EUCARISTÍA

Una vez cerrada la Puerta Santa, los actos se han trasladado al interior de la Catedral de Santiago, dónde el arzobispo ha presidido una Eucaristía en honor de la virgen Peregrina y en conmemoración del final del Año Santo.

Durante la Santa Misa, que ha estado plagada de referencias al Año Jubilar, Julián Barrio se ha dirigido a los fieles en una homilía en la que ha erigido la tumba del Apóstol en "luminosa referencia espiritual para tantos peregrinos" y ha considerado que este Año Santo ha contribuido a "purificar la fe, revitalizar la religiosidad y renovar la vida cristiana". Para concluir, los presentes han disfrutado del funcionamiento del Botafumeiro.

El arzobispo de Santiago cree que el Año Santo ha "contribuido a purificar la fe" y a "renovar la vida cristiana"
El arzobispo de Santiago, monseñor Julian Barrio Barrio, ha asegurado este viernes que el Año Santo 2010 ha contribuido a "purificar la fe, revitalizar la religiosidad y renovar la vida cristiana".

En una homilía leída durante la celebración eucarística posterior al cierre de la Puerta Santa, monseñor Barrio ha erigido la tumba del Apóstol Santiago en "luminosa referencia espiritual para tantos peregrinos", al tiempo que ha recordado que "a pesar de las infidelidades" de las personas, Dios "guarda su alianza eternamente".

"Damos gracias por haber llegado a esta meta", ha subrayado el arzobispo, que ha reclamado que "la misericordia del Señor" venga sobre los hombres "como lo esperan de Él".

Por ello, Julián Barrio ha instado a los fieles a "ser testigos del amor de Dios en la familia, en la sociedad, en el mundo de la cultura y en la profesión laboral" con "un estilo de vida cristiana que brilla por la verdad" que "hace libres" y "la caridad que se manifiesta en la bondad".

Asimismo, monseñor Barrio ha indicado que la Puerta Santa "como símbolo se ha cerrado" este viernes, aunque "queda siempre abierta la Puerta que es Cristo, Camino, Verdad y Vida".

Para finalizar su homilía, el arzobispo de Santiago ha tenido unas palabras de agradecimiento al Papa Benedicto XVI por su visita a Santiago de Compostela el pasado 6 de noviembre, así como a la Virgen Peregrina, a quen ha ofrecido la Eucaristía. "La Iglesia es peregrina en el tiempo hacia la eternidad", ha señalado. (Fuente: elCorreoGallego.es)